En Prevención de riesgos laborales cualquier recipiente o parte de un equipo que está a presión debe ser tenido en cuenta.
Presión por encima de 0,5 bar.
Cuando la presión es superior a 0,5 bar existe reglamentación específica, Real Decreto 2060/2008, por el que se aprueba el Reglamento de equipos a presión y sus instrucciones técnicas complementarias, quedará derogado por el Real Decreto 809/2021, por el que se aprueba el Reglamento de equipos a presión y sus instrucciones técnicas complementarias (ITC), que entrará en vigor el 2 de enero de 2022.
Las instalaciones las debe hacer una empresa instaladora de equipos a presión, que tendrá que haber acreditado que dispone de los medios adecuados para realizar las instalaciones y asume la responsabilidad de su correcta instalación (habilitadas para el ejercicio de la actividad) y se clasificarán en dos categorías:
Categoría EIP-1: Para realizar instalaciones que no requieran proyecto.
Categoría EIP-2: Para realizar instalaciones con equipos a presión que requieran proyecto, o también las indicadas para la categoría EIP-1.
Las reparaciones las debe realizar un empresa reparadora de equipos, que tendrá que haber acreditado que dispone de los medios adecuados, realiza las reparaciones y asume la responsabilidad de las mismas, o por la o el fabricante del equipo.
El mantenimiento adecuado de todos los sistemas de la instalación es una obligación para el usuario.
Las inspecciones periódicas a las que se han de someter estos equipos serán realizadas por una empresa instaladora de equipos a presión, o por un organismo de control habilitado, según sea el caso.
Mantener en funcionamiento instalaciones sin haber superado favorablemente las inspecciones, revisiones o comprobaciones establecidas en la normativa de desarrollo de la presente ley, se califica de infracción grave.
Las medidas preventivas deben asegurar que no se va a realizar la apertura de ningún recipiente a presión que mantenga presión y es muy recomendable que exista un procedimiento a seguir previo a la apertura.
Presión inferior a 0,5 bar
Las presiones por debajo de 0,5 bar, presentan también riesgo, en menor grado, pero para ser tenido en cuenta en los equipos dónde existir.
Por ejemplo, en una puerta de registro de accesos a un filtro de mangas puede haber presiones inferiores a 0,5 kg/cm2, en algún momento del proceso de limpiado a presión de las mangas. Una puerta de 1,5 m de alto 0,6 m de ancho, que representa una superficie de 9000 cm2, que a una presión sólo de 0,1 kg/cm2 implica una fuerza de 900 kg, que puede golpear en caso de apertura cuando hay presión.
Por tanto, siempre que haya algún recipiente o parte de algún equipo a presión superior a la atmosférica; hay que tenerle un claro respeto.
Presión por encima de 0,5 bar.
Cuando la presión es superior a 0,5 bar existe reglamentación específica, Real Decreto 2060/2008, por el que se aprueba el Reglamento de equipos a presión y sus instrucciones técnicas complementarias, quedará derogado por el Real Decreto 809/2021, por el que se aprueba el Reglamento de equipos a presión y sus instrucciones técnicas complementarias (ITC), que entrará en vigor el 2 de enero de 2022.
Las instalaciones las debe hacer una empresa instaladora de equipos a presión, que tendrá que haber acreditado que dispone de los medios adecuados para realizar las instalaciones y asume la responsabilidad de su correcta instalación (habilitadas para el ejercicio de la actividad) y se clasificarán en dos categorías:
Categoría EIP-1: Para realizar instalaciones que no requieran proyecto.
Categoría EIP-2: Para realizar instalaciones con equipos a presión que requieran proyecto, o también las indicadas para la categoría EIP-1.
Las reparaciones las debe realizar un empresa reparadora de equipos, que tendrá que haber acreditado que dispone de los medios adecuados, realiza las reparaciones y asume la responsabilidad de las mismas, o por la o el fabricante del equipo.
El mantenimiento adecuado de todos los sistemas de la instalación es una obligación para el usuario.
Las inspecciones periódicas a las que se han de someter estos equipos serán realizadas por una empresa instaladora de equipos a presión, o por un organismo de control habilitado, según sea el caso.
Mantener en funcionamiento instalaciones sin haber superado favorablemente las inspecciones, revisiones o comprobaciones establecidas en la normativa de desarrollo de la presente ley, se califica de infracción grave.
Las medidas preventivas deben asegurar que no se va a realizar la apertura de ningún recipiente a presión que mantenga presión y es muy recomendable que exista un procedimiento a seguir previo a la apertura.
Presión inferior a 0,5 bar
Las presiones por debajo de 0,5 bar, presentan también riesgo, en menor grado, pero para ser tenido en cuenta en los equipos dónde existir.
Por ejemplo, en una puerta de registro de accesos a un filtro de mangas puede haber presiones inferiores a 0,5 kg/cm2, en algún momento del proceso de limpiado a presión de las mangas. Una puerta de 1,5 m de alto 0,6 m de ancho, que representa una superficie de 9000 cm2, que a una presión sólo de 0,1 kg/cm2 implica una fuerza de 900 kg, que puede golpear en caso de apertura cuando hay presión.
Por tanto, siempre que haya algún recipiente o parte de algún equipo a presión superior a la atmosférica; hay que tenerle un claro respeto.